Molino del Rey

Edificio de construcción típica del patrimonio industrial andaluz, erigido por los Jesuitas en la segunda década del siglo XVII para la molturación de la aceituna. En 1767 se produjo la expulsión de los Jesuitas junto a la incautación de todos sus bienes por el Estado. En San Sebastián de los Ballesteros se instalaron nuevos colonos procedentes de centro de Europa, los cuales continuaron con las labores de cultivo de estos terrenos y utilizaron dicho molino, denominado Molino del Rey, en honor al monarca.

Ya en el s.XX, el Molino del Rey pasó a ser propiedad privada continuando la actividad aceitera hasta la década de los cincuenta, cuando quedó en estado de abandono, y en 2007 es rehabilitado para poder ser visitable. La arquitectura del Molino del Rey la forman un gran patio en forma de “L”, edificaciones auxiliares, el edificio principal y el torreón que sujeta la viga del Molino. Está constituido por dos naves rectangulares. En una de éstas se encontraba el solero donde giraban las piedras cónicas que servían para moler la aceituna y, en la otra, se situaba la viga para el prensado y la bodega, lugar donde se almacenaba el aceite en grandes tinajas enterradas en el suelo.

Actualmente se encuentra incluido en el catalogo de Patrimonio Histórico Andaluz y en el de Hacienda, Cortijos y Lagares de la Junta de Andalucía